Los peces globo son fascinantes criaturas marinas, únicas y misteriosas, que habitan en las aguas cálidas de los océanos del mundo. Son conocidos por sus sorprendentes habilidades para aumentar su tamaño y volverse redondos cuando se sienten amenazados. Una metamorfosis asombrosa que los hace pasar de ser peces discretos y apacibles a convertirse en bolas espinosas prácticamente indigeribles.

Aunque algunos peces globo son de agua dulce, su gestión es un desafío incluso para los acuaristas más experimentados, ya que su cuidado es muy exigente y necesitan condiciones muy específicas. Su dieta es igualmente particular y consiste principalmente en invertebrados y algas. Informarse y comprender sus necesidades es fundamental antes de aventurarse en su cuidado.

Pero su peculiar forma de defensa no es el único rasgo curioso que poseen estos peces. Resulta que los peces globo también son uno de los animales más venenosos del planeta. Sus espinas están cargadas de tetrodotoxina, un veneno potentísimo que puede matar a los predadores y que ha causado la muerte de numerosas personas en Asia donde, pese a todo, se considera una delicadeza gastronómica.

En Japón, para poder cocinar y servir pez globo, los chefs deben someterse a una rigurosa capacitación y obtener su licencia, una tarea que puede llevar varios años. Aun así, la preparación del pez globo sigue siendo peligrosa, ya que una mala manipulación puede ser mortal.

En resumen, los peces globo son criaturas asombrosas, pero altamente venenosas. Su capacidad para inflarse como una pelota, su complejo cuidado en acuarios y su papel en la gastronomía japonesa los convierten en uno de los animales marinos más intrigantes y temidos. Aunque a primera vista puedan parecer sencillos y hasta simpáticos, su manejo requiere precaución y respeto. Porque, tras sus espinas y su piel lisa, se esconde un mundo asombroso y mortalmente hermoso.